Las cuatro plantas solares son para autoconsumo total del tipo denominado "inyección cero". Esto significa que la energía producida se destina íntegramente a cubrir las necesidades del aeropuerto sin producirse en ningún caso vertido a la red. Forman parte del Plan Fotovoltaico diseñado por AENA cuyo objetivo es lograr el 100% de autoabastecimiento energético renovable en sus instalaciones aeroportuarias en 2026. En todas ellas se utilizan módulos solares monocristalinos de 340Wp, orientados a sur, colocados sobre estructura fija anclada a suelo con la excepción de Gran Canaria, donde la planta se convierte en la marquesina del parking del propio aeropuerto.
Los parques solares de mayor entidad, en producción desde diciembre de 2020, son los de Tenerife Sur y Fuerteventura. En cada uno de ellos se han colocado más de 3.000 módulos, 10 inversores, un centro de transformación, un centro de reparto -en el caso de Fuerteventura se ha ampliado el existente- y los equipos de Control Dinámico de Potencia necesarios. En ambos casos la potencia nominal instalada es de 1.000 kW -1.033 kWp- con lo que se estima producir 1.740 MWh de energía renovable al año. Las plantas correspondientes a los aeropuertos de Lanzarote y Gran Canaria contarán con una potencia nominal instalada de 850 kW y 600 kW respectivamente y más de 4.400 módulos fotovoltaicos instalados. La producción conjunta anual estimada asciende a 2.510 MWh.